PREVIA | Pedro Expósito.- Con la posibilidad de luchar por el primer título de la temporada UDC Torredonjimeno y Real Jaén CF, dos clubs amigos, se retan sobre la hierba natural del Estadio Matías Prats, en la tarde del 20 de septiembre a las 20:45 horas, por conseguir el billete directo a la final de la V Copa Presidente de la Diputación que se jugará en la localidad de Ibros.
Una vez llegada la ronda de semifinal ambos conjuntos quieren estar en la final para pelear con el CD Tugia Juego Limpio de Primera División Andaluza, y en condición de favoritos, por levantar la copa de un torneo que, pese a que muchos clubs la utilizan como mera preparación, ha llegado para convertirse en un referente importante de nuestro fútbol provincial.
Para Tomás Membrado, presidente del Real Jaén, y Andrés Rodríguez, hombre fuerte y con el poder ejecutivo de la entidad blanca, conseguir este trofeo se ha convertido en algo importante. Competir en este torneo con el respeto por la competición, el rival y sin tirarlo a la basura pese a las apreturas de calendario, ha sido un mantra en el vestuario blanco, que ve con buenos ojos esta oportunidad que el fútbol provincial le pone ante sí de levantar su segundo trofeo y ser el primer club, de los cuatro vencedores anteriores, que repite.
En el Matías Prats, sede de las dos primeras finales de este torneo, fue precisamente donde el Real Jaén levantó su primera Copa Presidente allá por la temporada 2015-16 y también donde logró imponerse por última vez en partido oficial al UDC Torredonjimeno, club al que ha ganado en los dos partidos que ha disputado, ambos en la pasada campaña, bajo su actual denominación.
Hay que remontarse muy atrás para encontrar una victoria tosiriana en su feudo ante el Real Jaén, fue en la temporada 2002-03 por cuatro goles a dos y bajo la denominación del extinto Torredonjimeno CF que militaría esa campaña en Segunda División B. Dieciséis años después el conjunto rojiblanco sueña con repetir aquella victoria en el Matías Prats ante los capitalinos y meterse en la final de un torneo donde lo más lejos que ha llegado ha sido a semifinales, tanto en esta edición como en la de 2016, en la que quedó apeado en dicha ronda a manos del Begíjar CF.
El mal momento de resultados, inesperado por otro lado, que llevan ambos conjuntos convierte este partido en trampa. Si bien es cierto que, pese a los esfuerzos de los impulsores de este trofeo, puede parecer éste un partido sin trascendencia sí que serviría para lavar tanto la imagen como para levantar el ánimo en dos clubs que a día de hoy no han respondido a las expectativas creadas en liga.
Tanto Manolo Chumilla como Germán Crespo quieren pasar y no van a doler las prendas si hay que alinear a algún teórico titular pese a lo vital de sumar el próximo domingo en liga. Una semifinal es suficiente aliciente para que ambos técnicos quieran quemar naves en pos de levantar a su tropa, si bien es cierto que este escenario siempre ha sido el de los futbolistas menos habituales y para el descanso de los más empleados.
Dar buena imagen, competir en buena lid, salir vencedor y meterse en una final relanzaría sobre todo a nivel moral tanto a los clubs como a sus files aficiones, ávidas de éxitos de los suyos. Una gran oportunidad para tomarse en serie la única competición que aúna a todos los equipos y categorías del fútbol jiennense.
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