Pedro Expósito.- Miguel Ángel Ruiz González seguirá sumando páginas de oro a su extensa carrera deportiva. El delantero ubetense vestirá una temporada más de corto, esta vez a las órdenes de Matías Sánchez en el CD Castellar Íbero, equipo del grupo dos de Segunda Andaluza Jaén.
El eterno goleador regresa a los terrenos de juego tras superar unos problemas físicos que lo apartaron durante parte de la pasada campaña. Con la ilusión intacta y la puntería de siempre, Miguel Ruiz afronta este nuevo reto con el objetivo de seguir perforando redes, como ha sido la tónica habitual a lo largo de su trayectoria.
Después de cerrar una nueva etapa en el CD Úbeda Viva, el club de su localidad, el delantero decidió parar en el tramo final de la temporada pasada. No le faltaron ofertas en este tiempo, pero finalmente se ha decantado por un proyecto ambicioso como el del Castellar Íbero, que peleará por ascender a Primera Andaluza Jaén.
En sus dos últimas campañas como jugador verde firmó números de auténtico crack: un ascenso, más de treinta goles, la conquista de la Copa Subdelegado y una permanencia sobrada el pasado curso, en el que anotó siete tantos en los catorce partidos que disputó como titular, pese a estar condicionado por las lesiones.
El club castellariego celebró su incorporación con un mensaje claro en redes sociales:
“Sobra presentación para una institución del fútbol provincial. Miguel Ruiz se suma a nuestro proyecto para aportar jerarquía y gol esta temporada. El mejor referente para crecer tanto individual como colectivamente y servir de guía a nuestros jugadores en la posición de 9. Temporada para disfrutar, temporada para crecer. Gracias Miguel por apostar con ilusión por el verde. A seguir sumando fútbol, trayectoria para la historia”.
Desde que debutara en 1998 en categoría sénior, Miguel Ruiz ha dejado huella en cada campo que ha pisado. Ha pasado por equipos de categoría nacional y provincial, acumula más de 400 goles en su haber y atesora una colección de títulos y anécdotas que lo convierten en una leyenda viva del fútbol jiennense.
A sus 45 años, el ariete ubetense no necesita presentación alguna. Su figura representa el fútbol pasional de antes, unido a un alto grado de compromiso, respeto y profesionalidad. Un ejemplo dentro y fuera del campo del que, a partir de ahora, podrán disfrutar y aprender los aficionados y jugadores del CD Castellar Íbero.
