Pedro Expósito.- El CD Avanza Jaén Paraíso Interior vivió este fin de semana una de las noches más especiales de su trayectoria en Segunda División. La Salobreja fue el escenario de un triunfo incontestable ante el por entonces líder, el Ciudad de Móstoles, que cayó por un contundente 6-0 en el partido correspondiente a la jornada nueve. Con esta victoria, los jiennenses abandonan los puestos de descenso, alcanzan la duodécima posición y suman 8 puntos, situándose dos por encima de la zona roja.
Desde el primer minuto, el equipo dirigido por Quique García mostró una versión sobresaliente, intensa y muy conectada con el partido. La alta presión azulona impidió a Móstoles desarrollar su juego en el 40×20, generando además múltiples llegadas de peligro. El premio al buen inicio llegó en el minuto 10: una brillante triangulación entre Titín, Gemes y Giasson terminó con un pase al espacio del italo-brasileño para que Titín, con una definición impecable, firmara el 1-0.
El conjunto visitante estuvo cerca de responder en la siguiente jugada, pero Giasson apareció providencial bajo palos para evitar el empate tras un malentendido defensivo. Aunque Avanza alcanzó la quinta falta antes del ecuador del primer acto, el equipo mantuvo la concentración y evitó conceder un lanzamiento de diez metros. Aitor, en una jugada individual de mucha calidad, rozó el segundo tanto, pero su disparo se marchó fuera por poco.
En la portería, Antonio Quesada, que repetía titularidad tras la Copa del Rey, vivió una primera mitad relativamente tranquila. Tras el descanso, Avanza mantuvo su intensidad, y esa insistencia tuvo premio. Un robo de Aitor en la banda derecha terminó en una asistencia perfecta para que Giasson anotara el 2-0 en el minuto 23.
El golpe obligó a reaccionar a Móstoles, que incluso vio cómo su portero Rafa Luque estuvo a punto de recortar distancias en una acción individual que acabó en el poste. La apuesta madrileña por el portero-jugador aumentó la exigencia defensiva de Avanza, que celebraba cada robo como un gol. Y precisamente de un error rival llegaría el tercero: un mal saque de córner dejó el balón a Iván Gemes, que desde su propia área marcó el 3-0.
La Salobreja era una fiesta y el equipo quiso más. Hugo Martínez y Ureña ampliaron la renta con dos goles desde larga distancia ante la portería vacía, colocando el 4-0 y 5-0. El broche final lo puso el canterano Tincho, que cerró la noche con un soberbio disparo a la escuadra para establecer el definitivo 6-0, un resultado histórico para el club.
Más allá de la contundencia, la victoria tiene un valor emocional añadido: supone una pequeña revancha ante un Móstoles que la pasada temporada fue el verdugo de Avanza en la última eliminatoria del playoff de ascenso. Hoy, el equipo jiennense vuelve a respirar fuera del descenso y encuentra un chute de moral para encarar la competición con energías renovadas.